domingo, 29 de octubre de 2017

Bilbao - Octubre 2017 - 1h 35min

Vaya fiesta!
Porque un evento nocturno, en el que se juntan miles de personas a disfrutar de algo en común, bien puede denominarse fiesta.
La media maratón número 25 de mi reto deportivo ha tenido uno de los mejores escenarios que cualquier corredor puede desear. Las gentes y las calles de una bonita ciudad, en este caso Bilbao...el ambiente que pueden generar más de once mil corredores y sus acompañantes, y que todo ello se desarrolló bajo el telón de una fantástica noche de sábado.
Segunda prueba, dentro de este crisol de ciudades, que se disputa en sábado al igual que ya me sucediera en Soria, por lo que mi estancia en la ciudad vasca fue de viernes a domingo. Ya el viernes paseando por sus calles, me quedó claro el gran ambiente que me esperaba para el día siguiente. Y así fue, la mañana previa a la carrera nocturna pude pasear y empaparme de todo lo que se vive en la feria del corredor de cada prueba y de ese momento tan emocionante que es la recogida del dorsal; bueno y también pude empaparme de la fabulosa cultura gastronómica de pinchos que por allí acostumbran.
Y ahora sí, después de un pequeño descanso de tarde en el hotel, llegó la hora, la noche se apoderó de Bilbao y la música y los fuegos artificiales hicieron acto de presencia en esta espectacular media maratón, ya solo me separaban veintiún kilómetros desde el estadio de San Mames hasta el museo Guggenheim. A pesar de ser una muy multitudinaria prueba, la salida está muy bien organizada por cajones, y nada más rodear el estadio ya se toma una gran avenida que hace fluir cómodamente la marea de atletas. La animación del público por las zonas céntricas de la ciudad es de diez, el recorrido te va plasmando una bonita película de las zonas más emblemáticas de Bilbao, grandes avenidas y muy buen avituallamiento líquido cada pocos kilómetros. Físicamente me encontré como realmente iba preparado, sin apenas tiempo para entrenar los meses anteriores, no podía buscar una gran marca así que acabe la carrera en 1h 35min, eso sí muy bien aprovechados porque la veinticinco del Reto 47 bien puede quedar enmarcada entre las cinco mejores carreras por todos los alicientes que os he ido relatando.
Para terminar quiero dejar a la organización una pequeña, que no por eso menos importante crítica, en la que coincidí con muchos de los corredores al terminar, faltó una buena dosis de fruta en la meta, tomen nota y el año que viene delen colorido al avituallamiento final.

PD: En Bilbao llueve, pero a la hora de la carrera no.