Después de dos meses sin correr prácticamente nada, llegó la hora de volver a poner mis piernas y mi cuerpo en forma, para seguir con las cuarenta carreras que aún me esperan, para completar este gran reto personal.
En este tiempo he podido reponerme de alguna pequeña lesión que venía arrastrando, y de la que ahora ya no queda ni rastro. Esta próxima semana empiezo a rodar de nuevo y espero que todo sean buenas sensaciones de cara a las pruebas que vienen a partir del mes de septiembre. No creo que esta vuelta a los entrenamientos se me haga muy cuesta arriba, porque las ganas de volver, y que no he parado de practicar mi otra gran pasión deportiva que es el tenis, tienen mi cuerpo preparado para esta nueva etapa.
Las dos siguientes ciudades que tachare en mi calendario son Soria y Valencia, de las cuales ya tengo inscripción y viaje cerrados. En septiembre, concretamente el día trece, vamos a los veintiún kilómetros de la Media Maratón Ciudad de Soria, con muchas ganas, pero con cautela porque tiene un trazado preparado para poner las piernas a prueba. Y el diecinueve de octubre, ya huyendo de los calores veraniegos nos espera Valencia, una multitudinaria carrera de cómodo recorrido para buscar buenos tiempos.
Por último solo me queda contar una muy buena noticia, una gran empresa especializada en modernos y selectos vinos y aceites, ha empezado a dar apoyo a mi gran reto y estoy muy agradecido, Divinity Wines quiere apoyar y fomentar esta lucha deportiva.
Gracias a ellos también tenemos una gran sorpresa para todos mis seguidores, entre todos los que, compartáis este nuevo post en las redes sociales Facebook o Twitter, los que deis a Me Gusta en su página de Facebook o por último, utilicéis el hashtag #DivinityReto47 en Twitter, van a sortear dos botellas de uno de sus mejores vinos y dos camisetas. Tenéis hasta el 31 de agosto de 2014 para participar, y el 1 de septiembre de 2014 publicare un pequeño post anunciando el ganador. Así qué os ánimo a probar suerte y por supuesto, a seguir todo este camino que aún me queda por andar.
